Ayer, hoy... mañana.

El ayer me recuerda tu presencia,

el ayer me recuerda lo feliz que era contigo.
¡Oh tiempos aquellos!
Tiempos en los que me sentía querido,
tiempos en donde me decías que yo era tu mundo,
tiempos que ya no volverán.

Hoy es uno de esos días que no vale la pena vivir,

hoy que estoy sin ti, mi universo está vacío,
tu sonrisa me iluminaba como el sol,
tu voz guiaba mi camino junto a la luz de la luna,
tus ojos eran estrellas que ansiaba observar cada noche,
 y en tus manos me podía refugiar de la tempestad…

Mañana será un día estéril,

mañana cualquier sol, luna o estrella buscará borrarte de mi memoria,
mañana no seré yo el que te haga sonreír,
mañana mi corazón gritará ¡VUELVE!
Pero por ahora, me sucumbiré en la utopía de creer que aún piensas en mí.

 Jeisson Padilla.

Autora: Eugeny makarenko

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